La segunda y en progresión ascendiente

La segunda cosa de la que quería hablar era del fin de semana en general, que ha sido un fin de semana celeste.

El viernes por la mañana me fui a Altamira para jugar un amistoso de fútbol-7 contra unos chavales de Cádiz, que no eran muy buenos, pero se aprovecharon de la empanada que llevaban mis jugadores para ganarnos. No importa, sólo era un amistoso. Después del partido me fui a comer con el ayudante de entrenador y, nada más terminar la comida, volví a Moncloa para una reunión de los que formaremos parte del grupo musical en la falla de Moncloa. Al término de la reunión volví a Altamira para el entrenamiento, que fue un auténtico desastre.

El sábado teníamos el partido a las 9 de la mañana, por lo que había que salir de Altamira a las 8:15, aproximadamente, por lo que 3 miembros del equipo decidieron dormir allí, para no tener que madrugar. A mí, como buen entrenador, me tocó dormir con ellos en Altamira, donde vimos un peliculón (Batman Begins) que nos hizo acostarnos demasiado tarde.

Sábado por la mañana. El amistoso del día anterior por la mañana, el horrible entrenamiento de la tarde, las pocas horas de sueño y el rival (nos había ganado 7-0 en la ida) auguraban una nueva derrota del infantil, pero no fue así.

Como ya empieza a ser habitual en este equipo, salimos ultramotivados, y a los pocos minutos un saque de Ángel, nuestro portero, sorprendió a sus defensas y Luis aprovechó el despiste para marcar un golazo de vaselina. Esto empezaba bien, pero y son muchos los partidos que empezmos ganando y terminamos palmando...

Nuestra defensa no cometía grandes fallos y nos fuimos a la media parte con ventaja en el marcador, aunque, como también viene siendo habitual, salimos dormidos en la segunda mitad y nos empataron en un error de marcaje. Supimos encajar el golpe y un gran pase de Luis lo aprovechó Guille para ponernos arriba otra vez. Esta vez no lo podíamos dejar escapar. O sí.

A falta de muy poquito para terminar el partido, cuando ya mis jugadores dejan de correr y deciden jugar andando, nos pitaron penalty por mano dudosa dentro del área. Gol y empate.

Aunque estábamos tocados, no nos habían hundido, y menos mal que hay jugadores que no dejan de correr en todo el partido, porque, después de que Pablo, nuestro capitán, salvara un gol cantado, salimos a la contra y llegó la alegría. El balón le llega a Guille, escorado en la banda derecha; con un par de recortes se va de sus marcadores y dispara cruzado. Al palo. Esto no ha terminado. El balón le cae a Charly, experto en marcar goles decisivos en los últimos minutos. Se revuelve. Tira como puede. El portero está vencido, pero el balón va muy lento. Da al palo y... ¡¡¡GOOOOOOOOOOOOOOOOL!!!

Después del partidazo, un merecido descanso para los chavales, que por la tarde volverían para la fiesta del terror en Altarmira, donde me pasé un par de hora haciéndoles bailar Thriller, de Michael Jackson. Imagino que después de esto pasará mucho tiempo hasta que vuelva a ver ese vídeo... Aquí os lo dejo:

Después del fiestón, cena en Altamira y a ver el Madrid, partido que no voy a comentar.

Finalmente, para redondear el fin de semana Celeste, victoria con el Sénior por 3-0 depués de 3 semanas seguidas empatando. Líderes de nuevo, aunque con un partido más...